Hay gastos indispensables como el arriendo, la alimentación o el pago de tus obligaciones financieras. Al hacer un presupuesto mensual, estos gastos no deberían superar el 50% de tus ingresos.
No se trata de volverse un tacaño o de no volver a salir de la casa para no gastar. Pero, siguiendo con el presupuesto, puedes destinar el 20% de tus ingresos a los gustos: algo de ropa nueva, salir de fiesta, ir a cine…
Un buen método para lograrlo es enviar ese porcentaje a productos como un CDT o a un Fondo de Inversión tan pronto recibes tu sueldo, así te aseguras de conservarlo y organizas tus gastos desde el comienzo del mes.
Plantéate una meta: por ejemplo que en cinco años logres ahorrar el dinero para la cuota inicial de un apartamento. Para lograrlo, debes calcular el promedio de esa cuota, divídela en 60 y ese es el monto mensual que debes ahorrar
en tu CDT o Fondo de Inversión
Ahora que sabes cómo organizar tus finanzas mensuales, te presentamos tres productos de BBVA que te ayudarán a lograr la meta de tener tu casa propia: Cuenta AFC, CDT y Fondos de inversión
Conoce sus diferencias y elige el que más te convenga: